El cuidado de los muebles para baño

Los muebles para baño son un componente fundamental para asegurar el orden, funcionalidad y decoración de los cuartos de baño. Hay una gran variedad de opciones para amueblar el baño, desde módulos prefabricados que integran al lavabo cajones, hasta gabinetes, clósets y cajoneras que permitirán guardar objetos, y productos de uso personal como rasuradoras, productos para el cabello, cremas, toallas, jabones, rollos de papel, cepillos, botiquín, etc.

La elección del mobiliario para el baño dependerá de las dimensiones del cuarto y de las necesidades en cuestión de capacidad y funcionalidad, es decir, para qué lo utilizaremos. El diseño y decoración del espacio también son determinantes para la elección del mobiliario pues, aunque pueda resultar muy funcional tener un mueble en el baño que nos ayude a mantener todo en orden, si es un elemento que desentona con el resto de la decoración, se convertirá en un factor molesto. Con estas consideraciones nos será mucho más sencillo elegir el material y acabados de los muebles para nuestro baño.

Uno de los factores más importantes a considerar, si no es que el más importante, al momento de elegir el equipamiento de nuestro cuarto de baño son los cuidados que tienen que recibir los muebles y accesorios que forman parte de él. El baño se caracteriza por presentar un alto nivel de humedad que además de poder estropear ciertos materiales, propicia el desarrollo de bacterias y gérmenes en este lugar. Por esta razón, es indispensable que todos sus componentes puedan limpiarse con facilidad y que tengan un alto grado de resistencia al agua y a la humedad.

Considerando lo anterior, los fabricantes de muebles para baño los construyen principalmente en estos materiales: vidrio, acero inoxidable, resina, acrílico, lacados, madera barnizada, chapas de madera y metacrilato.

Como mencionamos anteriormente, existen muebles prefabricados en módulos que por ejemplo, integran a un par de gabinetes el lavabo en la parte superior y en los costados incorporan portarrollos y toalleros o que se componen de un juego de gavetas para empotrarse a la pared a juego con un tocador.

Existen disponibles en el mercado, gran variedad de muebles para baño en distintos diseños, materiales y dimensiones. Algunos proveedores incluyen la opción de adaptar los muebles según los requerimientos y el gusto del cliente. Mandar a hacerlos a la medida con un diseño único puede resultar lo más conveniente para muchos. Elige la opción que se adapte mejor a tus necesidades y no dudes en consultar a un especialista que te guie en el proceso de elección.

Si bien, los muebles para baño se fabrican especialmente para resistir las condiciones del lugar, es importante que le des la limpieza y cuidado apropiados para que no se dañe y no disminuya su tiempo de vida. Para ello es necesario que tomes en cuenta ciertas medidas según el material del que están construidos. A continuación te damos algunas recomendaciones para limpiar tu mobiliario:

  • Vidrio. Limpiálo regularmente con un paño húmedo y en caso necesario, con un limpiacristales. No es conveniente que utilices otro tipo de limpiadores químicos pues podrían dañar el vidrio. Elimina siempre el exceso de humedad con un paño.
  • Acero inoxidable. Utiliza agua tibia y un paño de microfibra para su limpieza. Evita el uso de desinfectantes que contentan cloro y en caso necesario, siempre dilúyelos en agua y no excedas el tiempo de contacto recomendado en las instrucciones del fabricante. Al terminar, enjuaga con abundante agua y sécalo bien. Para eliminar manchas puedes emplear una mezcla jabonosa en agua caliente y tallar con una esponja que no raye la superficie.
  • Lacados. Limpia estos muebles con un paño humedecido en agua, de preferencia utiliza gamuza que es más suave y no deja pelusas. Manténlos siempre secos. En ningún caso utilices productos que contengan disolventes, acetona o amoníaco para limpiarlos.

Pasarles un trapo con glicerina líquida o con aceite de linaza a  los muebles con lacado los hará lucir brillantes. En caso de que el lacado blanco haya adquirido una apariencia amarillente, utiliza pulimento para carro.

  • Resina. Limpiálos con agua y jabón utilizando una esponja. Posteriormente sécalos con un paño porque al evaporarse, el agua puede dejarle manchas. Utilizar bicarbonato de sodio o vinagre blanco en la limpieza de los muebles de resina te ayudará a eliminar manchas, puedes incorporarlos a la mezcla jabonosa con la que limpias habitualmente la resina y emplear un cepillo para tallar la superficie.
  • Madera y chapas de madera.  Para limpiarlos utiliza un paño húmedo. En el mercado se encuentran disponibles diversos productos para el cuidado, la limpieza y el brillo de madera pero te recomendamos no utilizarlos con mucha frecuencia.

Los muebles fabricados con estos materiales son muy sensibles a la luz, a la humedad y al polvo por esto te recomendamos que no coloques objetos sobre las superficie de madera hasta pasadas varias semanas de su instalación, cuando el mueble se haya adaptado a las condiciones del cuarto, esto evitará la generación de manchas y variaciones en el tono de la superficie.

Siempre elimina las acumulaciones de agua con un paño suave.

  • Plástico y metacrilato. Limpiálos con agua jabonosa utilizando una esponja suave. Para el metacrilato también puedes utilizar un limpiacristales y es recomendable usar un jabón neutro para conservar el buen aspecto del mueble. El plástico es un material resistente, si es necesario puedes utilizar un cepillo para eliminar las manchas.

Recuerda siempre usar guantes y mantener el espacio ventilado, sobre todo si utilizas productos químicos en la limpieza de tu baño.

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